¿Cuánto debería ahorrar su iglesia?

Los gastos imprevistos son inevitables. ¿Qué tan preparada está su iglesia para el próximo imprevisto que interrumpe el flujo de caja regular?

El COVID nos enseñó que las circunstancias pueden cambiar drásticamente en cuestión de días. Dentro de una sola semana, muchas iglesias no pudieron celebrar reuniones presenciales los fines de semana. También presenciamos el impacto del COVID en nuestras comunidades. Negocios y restaurantes cerraron. Los empleados perdieron sus empleos. Esto continuó semana tras semana. Las semanas se convirtieron en meses, los meses en un año.

A medida que la asistencia y las donaciones disminuyeron, muchas iglesias recurrieron a sus ahorros o se endeudaron para transicionar a la iglesia virtual y cubrir sus gastos operativos. ¿Estaba su iglesia preparada para el impacto financiero del COVID-19? ¿Su iglesia aún se está recuperando?

Todos oramos y esperamos que no vuelva a ocurrir una pandemia mundial, pero es probable que la iglesia experimente gastos o eventos imprevistos periódicos que afecten el flujo de caja. El equipo falla, pastores se jubilan o renuncian, misioneros solicitan apoyo, etc. Sin embargo, como miembros del Reino de Dios, no vivimos con temor a lo que acecha a la vuelta de la esquina. En cambio, debemos usar sabiduría para prepararnos para eventos y gastos inesperados.

Esto nos plantea la pregunta: ¿Cuánto debería tener ahorrado su iglesia?

La respuesta general es de tres a seis meses de gastos operativos y ministeriales, pero dividámoslo en pasos más específicos y viables.

1. Determine sus gastos mensuales.

Primero, calcule el costo de un mes de ministerio para su iglesia. Dado que los ingresos y gastos de la iglesia fluctúan a lo largo del año, divida los gastos anuales del año pasado entre 12 meses. Por ejemplo, si su gasto anual de ministerio es de $150,000, el gasto mensual promedio es de $12,500.

2. Multiplique sus gastos mensuales por tres.

Una vez que haya determinado los gastos mensuales promedio de su iglesia, multiplique esa cifra por tres. En este ejemplo, la meta mínima de ahorro es de $37,500 ($12,500 x 3 meses). Ahorrar al menos tres meses de gastos le proporcionará suficiente margen financiero mientras enfrenta cargas financieras inesperadas y realiza los ajustes financieros y organizativos necesarios. También le permitirá cubrir necesidades financieras emergentes sin interrumpir el flujo de caja del mes en curso.

3. Diversifique sus ahorros.

Finalmente, sería prudente diversificar sus ahorros. Considere guardar al menos los gastos de un mes en una cuenta corriente o de ahorros de fácil acceso. Los ahorros de los dos meses restantes podrían colocarse en una inversión a corto plazo. Esto permitiría que sus ahorros crecieran a un ritmo mayor y apoyaría a otros ministerios.

Por ejemplo, GenFi Ministries ofrece una cuenta de acceso a 30 días, que suele ofrecer una tasa de interés más alta que una cuenta de ahorros de un banco local. Los fondos están disponibles con un aviso por escrito con 30 días de anticipación, y no hay penalización por retiro anticipado con ese aviso.

Entonces, en nuestro ejemplo, la iglesia colocaría $12,500 en una cuenta bancaria local (corriente/de ahorros) e invertiría los $25,000 restantes en una cuenta de acceso de 30 días.

Practicando la administración

Los eventos y gastos imprevistos son parte del ministerio. Tener una cuenta de ahorros adecuada le ayudará a afrontar estos imprevistos y gastos con más confianza y menos estrés. Sobre todo, es una sabia administración de los recursos que Dios ha confiado a su iglesia para impulsar Su misión en su comunidad y más allá.

GenFi Ministries es su aliado en el ministerio. No dude en contactarnos para hablar sobre sus necesidades de ahorro e inversión.

Próximos pasos:

1) Determine el monto mínimo de ahorro de su iglesia.

2) Ajuste el flujo de efectivo actual para permitir que una parte de los ingresos de su iglesia se deposite en una cuenta de ahorros.

3) Comuníquese con GenFi Ministries para invertir en una cuenta de acceso de 30 días u otra nota de inversión.